Los gatos no pueden ver en la oscuridad total, pero ellos tienen una
mejor percepción visual en la penumbra que el ser humano u otros
animales. Esta habilidad es debido a la anatomía ocular especial del gato.
En relación al tamaño de su cabeza, el gato tiene los ojos sumamente
grandes. La superficie del ojo (la córnea) es muy curva (convexa) lo
que permite la mayor penetración de luz posible.
El gato puede abrir su iris (la porción coloreada de su ojo) muy ampliamente para permitir una mayor entrada de luz.
Cuando la luminosidad es intensa se puede observar que la pupila es una
fina línea, debido a que se encuentra contraída por el exceso de luz,
la pupila se irá dilatando a medida que la luminosidad disminuya,
dilátandose al máximo en la penumbra para permitir la entrada de la
escasa luz existente en ese momento, pero con esa pequeña cantidad de
luz y las características anatómicas de su aparato ocular le permitirá formar la imagen en su retina y ver en la penumbra.
interesante...
ResponderEliminarMuy bien explicado Amina. ¿Tú lo entiendes todo bien? Aún no hemos estudiado las partes del ojo...
ResponderEliminarLa profe.
muy chulo¡
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